El grupo INDITEX y su influencia en la moda española

Por Malena González Alemany, desde Barcelona, para PDLM.

Permitidme, antes de empezar a teclear cualquier cosa, avisar que pretendo hacer de esta sección algo así como un baúl de sastre, sin nada fijo, adaptándome a lo que veo, a lo que me sorprende y ante lo que no puedo dejar de indignarme.

Dicho esto, llegamos al tema de hoy. Me veo constantemente en la misma situación: preguntándole a alguna amiga dónde ha comprado esa increíble camiseta, ese llamativo vestido o ese clásico blazer. Antes de que se dispongan a contestar, tengo el 70% de posibilidades de que su respuesta sea lo que ya se ha convertido en recurrente: es de Zara, de Pull and Bear, de Stradivarius, de Bershka...

Zara ofrece tanto prendas básicas que sirven para el día como propuestas formales para la noche.

Todas esas marcas -entre muchas otras, en las que también encontramos una línea de ropa interior y otra de artículos para el hogar- forman parte del grupo español INDITEX -Industria de Diseño Textil, S.A-, que en el último año ha tenido un incremento del 1,9% pese a la crisis económica en España y no haber abierto nuevas tiendas en el país.

Pull and Bear y su ya característica línea joven y fresca.

No es extraño el triunfo de INDITEX, ya que cada una de sus tiendas ofrece un tipo de ropa diferente, que se adapta a ambos sexos y diferentes edades, siempre siendo fiel a las tendencias y, sobretodo -este es su mayor atractivo-, a sus bajos y accesibles precios.

Stradivarius propone el mix de estampas floreadas y mucho color.

Sin embargo, como todo, también tiene sus desventajas y la más evidente es la que nace como consecuencia de los bajos precios: es inevitable toparse en la ciudad, en las aulas de los colegios o en algún restaurante con alguien que tenga los mismos zapatos que tú, y te encontrarás de nuevo diciendo: ¡Yo también tengo esos zapatos! Mientras oyes la respuesta de siempre: ya....es que son de Zara. 

Si buscas aires folk y desenfado imposible no encontrarlo en Bershka.

Aún así, no debemos pasar por alto que muchos de los consumidores buscan una identidad personal a través de estas firmas de consumo masivo, por paradójico y sin sentido que parezca, en realidad tiene mucho sentido y mucho mérito por parte de Amancio Ortega -dueño de INDITEX-: no solo ha conseguido que sus tiendas sean las que vistan a la mayor parte de la población española, sino que consigue que sus consumidores se sientan parte de una sociedad y que encuentren la antes comentada "identidad personal".

¿Encuentran algún punto de unión entre lo que sucede con la firmas masivas españolas y la industria textil argentina? ¿Les ha pasado eso de ver gente "uniformada" por las calles?